lunes, 17 de agosto de 2020

Testimonio de un prostituto: Los nuevos acontecimientos...

 

Nuevamente, me he visto en la necesidad de volver hablar, sí, sobre el oficio que me vi obligado a iniciar, al mismo tiempo me atormenta, ya que no me queda otra opción... si no queremos acabar bajo un puente, con niños pequeños... Yo acepte este trabajo, solo yo, para nada quería que mi mujer se viera invulucrada... Se que ha tenido un pasado dificil, hacer algo así, no es nada facil para ella...

Yo, solo yo, me enfrentó a esta responsabilidad... pero ya conocen a mi mujer, acepto entrevistarse, con la misma chica, que un día me entrevistó a mi, y aceptó transmitir estas palabras de mi parte... ¿Por qué? Porque lo necesito, porque todo esto es muy duro... cuando empecé no pensé que siguiera este rumbo. Así que antes de nada, gracias por dar a conocer, mis mas sinceros y recientes sentimientos.


Bien ya saben, que por voluntad suya, mi mujer, se ofreció a ayudarme en el oficio... al principio, no me parecía tan mala idea, claro siempre con clientes bien, que se que no son peligrosos, claro que ya ha conocido el más salvaje, aunque gracias a ello, fui consciente, que no era tan salvaje como creía, al menos acepta negaciones... pero ese no es el caso... Ella tenía y tiene sus limites. Yo la apoyo totalmente... si ella participa, es porque ella quiere, porque es mi trabajo, mi obligación... pero por un lado... lo veía una manera, para que ella conociera, y tuviera aventuras sexuales, siempre me he considerado un hombre liberal, siempre me ha gustado que ella tuviera sus experiencias, cuando nuestros hijos crezcan, tengamos nietos, poderles contar... la verdad antes que nacieran los niños, nuestras aventuras sexuales tuvimos, algún trío hicimos...

Pero ahora, lo veo de otra forma, no por mi manera de pensar... eso sigue de la misma manera, si accedí, a que me ayudara, era para que conociera, y siguiera teniendo experiencias... pero ahora... No por ella, al contrario le agradezco la ayuda, lo hace estupendamente... es por mis clientes... Todos, o la inmensa mayoría son heterosexuales, ya que una vez que ella participa, ya siempre la quieren a ella también... ya se niegan a venir, cuando no está ella, realmente, estoy perdiendo clientes... eso me frustra, y no poco.


Ella tiene sus limites, que me parecen excelentes, y sí, se desnuda, se deja tocar, les hace una paja o mamada, ya a más no se atreve... de jovencita, sufrió abuso sexual, eso es algo que jamás se olvida, ni se supera del todo... ahora lo se, puedo entenderla mejor, ya que yo he pasado por algo igual... pero eso es algo que los clientes, aunque en un principio aceptan sin problema, no dejan de insistir, aumentar su propina para conseguirlo, al no hacerlo, dejan de venir... si vuelven, ya sin mi mujer no quieren... Mi temor aumenta también porque muchos llegan drogados, o se drogan al llegar... el sentido de la realidad, se les va, temo que se les pase la mano con ella... acabemos lamentando todo, personalmente no me lo perdonaría jamás, que mi esposa acabé violentada, por mi trabajo, por mi responsabilidad, no JAMAS. Es algo complicado... pero tendré que encontrar la manera, por mucho que ella se niegue, me tendré que negar a su ayuda (ella lo hace, por ayudarme, es un trabajo, que personalmente no me es nada fácil, aun menos con los clientes que me llegan) y siente que está poniendo su granito de arena, para sacar la familia adelante (que ya lo hace sin la necesidad de someterse) pero ella no lo ve así... y ufff a tozudez no la gana nadie....

Y bueno, la otra vez di mi mas sincero testimonio... de este oficio... ahora lo mismo... pero sobre los nuevos acontecimientos, de tener una ayudante femenina.

Relato real, NO AUTOBIOGRÁFICO

Escrito: 10 de mayo del 2014

Sígueme también.... Reflexiones, relatos, y poesías de Vane

No hay comentarios:

Publicar un comentario