jueves, 27 de agosto de 2020

Reflexión Personal: Por qué hay una psicópata en mi

 

Sí, hay una psicópata dentro de mi... hoy mismo me he sorprendido al descubrirla, leyendo el segundo libro de la trilogía "las cincuenta sombras de Grey" o mejor dicho aun Las 50 sombras mas oscuras, sobretodo en la escena donde Anastasia Steel, se defiende muy bien ella solita de un acosador, que tenía intenciones mas obscenas con ella que un simple acoso sexual.

Me lleno de orgullo, cuando está se defiende con todas, todas, le da ese castigo físico a su acosador, evitando el abuso sexual de su cuerpo... Supongo que no es algo para orgullecerse sentir, plena alegría cuando un hombre con esas intenciones violentas, recibe un pleno y duro castigo físico.



Pero es como me siento... cuando leí como Anastasia le dio su merecido a ese violador, me lleno de alegría y satisfacción. No solo es por esa protagonista, hay otra chica, que realmente, al ver su trilogía, me sentí tan identificada con ella, que es mi heroína numero uno, sí Lisbeth Salander, de la trilogía "los hombres que no amaban a las mujeres", desde ya, en el puesto numero dos, Anastasia Steel. Sí con Lisbeth me llené de horror al ver su tremenda violación... Pero me llenó de orgullo y felicidad, ver su venganza, y atacó a su violador (que era su tutor legal) entre otros le tatuó, sin anestesia ninguna "soy un cerdo sádico y y un violador" escuchar los gritos de horror y sufrimiento de ese tipo, me lleno de aire el pecho, y de orgullo el corazón... Es que como a Lisbeth Salander, la vida me ha mostrado, que la llamada justicia, poco actúan, esos sádicos siempre salen ganando, dejando a la victima indefensa y constantemente temblando.

Afortunadamente, no me han llegado a violar totalmente, estoy convencida, que un ángel de la guarda, me ha protegido de esas atrocidades, pero han sido tanto los intentos, que mis emociones, sentimientos, son como si hubiese sido no victima de acoso, sino de una mujer violada.

Realmente no entiendo el porque de tanto intento, probablemente, un factor importante, es mi discapacidad, al ir en silla de ruedas, normalmente sin mas compañía conmigo misma, he sido un blanco fácil, para todos esos depravados.

 Una idea que se tiene es que los violadores, salen de los callejones, ahí se encuentran acechando a la victima perfecta, quizás si... alguno hay de esos, pero por regla general, son gente cercana a la persona, incluso familiar, o cuidador... Yo confirmo esa teoría. Muchos me han acosado con el intento de abusar de mi cuerpo, de mi ser... no han sido uno o dos, no, han sido varios más... pero lo que si os voy a decir con seguridad, es que no han sido desconocidos... no... han sido personas cercanas a mi, mi entorno;

 

  • El vecino del barrio; Sí él siempre, desde que era niña, decía que era su novia, hasta ya con 18 años, me encontró por la calle, me acorraló, me besó en la mejilla, pese mi intento de evitarlo, apestaba alcohol, no me dejaba ir, me tenía acorralada, yo estaba acojonada... ¿Como salí de aquella? Le acompañaba su mujer, que noto mi incomodidad, le ordenó que me dejara. Pero ahí no acaba la historia, eche a correr, muerta de miedo, corrí a casa, me encerré, le conté a mi madre lo sucedido... lo que me transmitió, no me tranquilizó; "Sí, hace 2 noches vino a buscarte para llevarte a no se donde" Me quedé petrificada ¿Porque un hombre de 60 años va en plena noche a recoger una chica de 18 para llevarla a dios sabe donde? ¿cuales eran sus verdaderas intenciones? ¿Realmente lo dudáis? Yo no, si le hubiese acompañado, me hubiese violado, de eso no hay duda. La cosa no había pasado, ya que los siguientes días... me lo encontraba a menudo y no me quitaba esa mirada pervertida de encima... ¿Como os sentiríais vosotr@s? Efectivamente yo me sentí igual...
  • El cuidador del centro; Era uno de los cuidadores del centro de verano para personas con discapacidad... Tenía 60 años, todo empezó un día de calor, nos mojaron la ropa, para refrescarnos, ese hombre empezó a jugar con nosotras en algo que yo veía inocente, pero sin ser consciente, nos iba tactando el pecho, que nuestras camisas mojadas, eran más que visibles... Días mas tarde... ese mismo hombre, me acompañaba mientras los demás llegaban. Yo estaba anclada en la furgoneta, ya que estaba preparada para volver a casa, fueron a por los demás, yo allí estaba sola con ese anciano o mejor dicho depravado. "Empezó a tocarme el pecho sin disimulo, me quedé atónita, puse mis brazos como protección, le grité que me dejará... pero él no paraba, no, es más reía y se burlaba de mi negativa, de mi suplica "¿quieres que te deje eh? ¿quieres que te deje? Entre carcajadas burlonas" La cosa no llegó a más, ya que empezaron a venir los demás. Él no tardo en alejarse, desapareciendo de la escena del crimen. Yo no se porque pero callé, hoy me arrepiento... porque no fuí, su única victima, no, él se aprovechaba de todas esas chicas que tenían que ir al baño, no podían gritar ¡¡¡No!!! Pero de alguna manera tuvo un final feliz, ya que el destino, tenía otro fin para ese degenerado, provocándose una embolia cerebral, impidiéndole andar y hablar.
  • Mi cliente; Yo trabajo vendiendo lotería, antes me encontraba en la calle, en las puertas de un supermércado, es lógico que en muchos momentos me encontrara sola, sin más compañía que conmigo misma. Llegaba ese cliente... me abrazaba y besaba sin preguntar nada, yo en un principio, lo encontraba indefenso, solo quería ser simpático y atento y ya, pero poco a poco fui consciente, que sus intenciones eran otras, esa tranquilidad que sentía al encontrármelo fue sustituida por la bien conocida temoridad... Al llegar mi marido, dejó de comprarme, ya cuando me lo encontraba por la calle, su mirada era pervertida... Una noche iba sola me lo encontré se entrepuso en mi camino, acorralándome el paso, aguantándose a los reposamanos de mi silla "¿donde está tu marido?" "¿Vas sola?" "¡Ya eres mía!" Con una sonrisa perversa. Una vez más salí ilesa, por el echo que no iba solo, sino con amigos... Porque sino... hubiese acabado en el hospital. La cosa no acabó ahí pocos días después me lo volví a encontrar, Emmanuel me acompañaba, ambos fuimos testigos que su mirada indicaba "Ya te pillare sola... no te escaparás de mi" Una vez más me libré de la violación pero esa vez me afecto bien... como si realmente hubiesen abusado de mi cuerpo y alma, estaba como ida, llorando todo el día, atemorizada de salir a la calle ¿Que decir de la vida sexual con mi marido? Durante semanas fue nula, por culpa de ese degenerado, al igual que mi estado en general... ¿Como acabó? Bueno a la justicia no podía ir, ya que era su palabra, contra la mía, no había pruebas... Asi que... Alguien se encargó de hacer justicia... y funcionó sí... ya que tarde en volver a verle, cuando me lo volví a encontrar, ya me trato con respeto, incluso como si no me conociera, cosa que me alegre enormemente.

 Estos han sido los casos mas fuertes de acoso, que no ha pasado a violación de milagro...

 Pero el acoso no acaba ahí, he vivido mucho más acoso que a continuación os lo voy a exponer, que aumenta mi psicopatía a los hombres psicópatas;


Cliente; No, no es el mismo cliente, este es otro cliente de cincuenta y tantos años, que solo me quería para follar... pero se quería casar conmigo por lo mismo "Yo te daré placer, tu me darás placer, follaremos, porque nadie más follará contigo" cada semana, me venía con el mismo cuento, asta que una vez le dije que se lo había dicho a mis padres... la cara de espanto, no fue pequeña, pero ya no me molestó más, aun mas cuando mi pareja, llego a mi vida.

  • El barrendero; Un hombre que pasaba de los 50 años, que me besaba, y abrazaba a su antojo, muchas veces, apestaba a alcohol, como comprenderéis, agrado ninguno mas, me causaba repugnancia.
  • El verdulero; Nunca me dijo nada, bueno si, 5 palabras "Qué tu novio... ¿Folla bien?" ¿Lo encontráis normal? Yo tampoco... incluyendo el típico jueguecito de ponerse delante de la silla de ruedas, ahora te dejo pasar, ahora.

 Todos estos alguno más que me he dejado, es todo el acoso sexual que he recibido, que ha echo que deseé todo el sufrimiento posible a los acosadores sexuales y violadores y disfrute con ello... En otras palabras... Todos ellos, sin contar todo el ciberacoso, han creado, esa parte psicópata que hay en mi, que hace que disfrute con el sufrimiento de todos esos psicópatas. 


Escrito: 17 de julio del 2014

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