lunes, 10 de agosto de 2020

Relato: la fantasía sexual de la violación

 


Marie era una chica solitaria, ya fuera por su gran timidez, o simplemente nadie le había enseñado a relacionarse... su padre la abandonó al poco tiempo de nacer, su madre siempre estaba ocupada entre su trabajo y las inmensas reuniones, que la obligaban a ausentarse todo el día.

Marie era una chica solitaria, invisible para los demás incluso para Peter, el chico mas popular del instituto, mas guapo de todo el planeta, lástima que el corazón de Marie no fuera consciente de esa ignorancia y palpitara con tal fuerza al verle, que parecía que se le saliese del pecho.

Marie tenía una fantasía que era tan atroz, que le avergonzaba, a lo mismo sabía que era para encerrarla en un manicomio, y tirar la llave por la ventana, al fondo del mar, para ya no más salir... En ocasiones soñaba con esa fantasia, la fantasia de ser violada, por Peter, el chico más sexy del planeta, en su mente ella se resistía, suplicaba que no, pero no escuchaba y su ropa arrancaba, su boca amordazaba, sus manos ataba de mientras la besaba y penetraba... Al despertar se encontraba húmeda, en sus zonas mas privadas... se detestaba así misma por tener ese tipo de sueños, de fantasías... miles de mujeres eran victimas de tal atrocidad, se avergonzaba y culpaba por desear algo así.

Los fines de semana eran largos y aburridos para Marie... Se pasaba el día encerrada en su habitación, frente al ordenador, escuchando música, escribiendo esa novela interminable, que sin saber porque no podía ponerle fin... a menudo su boca producía, lo que su mente transmitía... aunque no hubiera nadie para escucharla, mas que su propio yo y esas cuatro paredes blancas...

Recibió un correó era de Samanta, la chica más famosa de insti, sabía que su contenido nada bueno traería, pero no tenía nada mejor que hacer y no tardó en abrirlo... Efectivamente no se equivocaba todo era burlas, insultos hacía su persona... ¿Por qué? ¿por su timidez? ¿Les daba derecho acosarla y maltratarla? Lágrimas resbalaban por sus mejillas, sin pensarlo empezó a teclear, en su diario internáutico... Cada letra era como un zarpazo, repleto de rabia e ira... lo que ella no era consciente, que no estaba escribiendo en una página en blanco, sino en un correo electrónico, con remitente, su peor enemiga. Aun ignorando la realidad, le dio al botón de enviar...

Recorría los pasillos de su escuela secundaría con sus libros, pegados en a su pecho, buscando su taquilla, sentía una extraña sensación... sus ojos miraba su alrededor... todos los ojos estaban pendientes a ella, después volvían a sus tareas.

"¿Pero que pasa aquí?" Pensó para si... al mismo tiempo con su cabeza baja, aceleraba el paso a llegar la taquilla... Le costó abrirla, ante la espera, miró a su alrededor, todos dejaron de mirarla de repente. Un golpe seco, la taquilla se abrió, dejó sus libros, fijándose antes que un papel sobresalía... se fijó en el... "Gracias por confesarme tu secreto" Sin aviso, todos los móviles indicaron señal de mensaje, el de Marie también, no tardo en ver... Lo que vio la dejo helada, con la boca seca, sin palabras, era ella desnuda, atada, amordazada, todo su cuerpo amoratado, de mientras un tipo con su cara sin identificar, la penetraba sin piedad...

sin aviso aparecieron unas letras "Es su máxima fantasía sexual... ¡quieren que la violen!" Marie sintió como una oleada de rabia y llanto se le venía encima, su única elección, fue correr, correr, correr tan rápido, que sus piernas era mas rápidas que sus pensamientos, que su vergüenza superior a la rabia y a la ira que la adueñaban. Sin ser consciente las lágrimas empezaron a resbalar por sus mejillas, un grito de impotencia salió de su boca "¿Por que? ¿por qué soy así? ¡lo detesto! ¡me detesto!"

Entro en su casa, aun debería estar en clase, pero su madre no se enteraría ella llegaba muy tarde de su empleo, si por un casual llegara antes, o se enterara, le diría que no se encontraba bien, la mandaron a casa... Encendió su ordenador, para escribir realmente en su diario... lo necesitaba, expresar en letras era lo único que la tranquilizaba, lo único que le quedaba, expresar en un papel, sus sentimientos que solo ella conocía, que nadie más se interesaba.

Abrió su bandeja de correo, para su sorpresa se encontró 30 correos que la esperaban... era una chica muy solitaria, nunca recibía correo de nadie, dudaba que los 30 fueran correo basura... No tardó en ir a ver... la mayoría tenía títulos como "ei quieres follar conmigo" "así que te gusta que te violen eh? Yo puedo hacerte tu fantasía realidad... Me excita mucho hacer daño a las mujeres" "a mi hermano y a mi nos gustaria complacerte... ¿Te dejarás no?" "Yo puedo hacerlo, siempre me ha ilusionado violar a una mujer" Todos eran de ese estilo, excepto... unos cuantos que decían... "tu estás mal de la cabeza tía" "ves a un psiquiatra loca" Marie se sobresaltó, que su primer impulso fue echar un paso atrás, en cuestión de segundos, eliminó toda la bandeja de entrada sin abrir ni un correo...

Quería desaparecer, quería la tierra se la tragara para ya jamás volver... ¿Como iba a volver ahora a clase? ¿Con que cara la mirarían? ¿Con que cara les miraría? Las siguientes semanas, no dejo de indagar distintas enfermedades para no tener que ir a clase... para no tener que enfrentarse a esa realidad que odiaba, que detestaba... ¿como podía desear que le destruyeran cuerpo y alma? ¿Y si esos correos tenían razón, si estaba al borde de la locura? Telefoneo a su madre, necesitaba escuchar su voz, necesitaba un apoyo, su apoyo, jamás la llamaba a la oficina... pero aquel día la necesitaba. Sus compañeros no pusieron pega... enseguida la pusieron con ella.

- Cariño... ¿estás bien? ¿Que te pasa?

- Mama, necesito hablar con alguien... ¡Te necesito!

- Es que en nada, entro en una reunión... está noche hablamos... ¿Te encuentras mal? ¿tienes fiebre?

- No mama, no tengo fiebre... no estoy enferma...

- ¿Como que no estás enferma? No entiendo... -seguía sin comprender esa madre, que por otro lado, escuchaba como la reclamaban -cariño me tengo que ir... hablamos esta noche, tu descansa, te quiero cariño -justo después colgó... Marie se sintió mas sola y decepcionada que nunca, un llanto desconsolado la invadió.

Los días pasaban los correos no cesaban, más de una veintena llegaban... muchos proponiéndola sexo... ella al instante los borraba... estaba tan desesperada... ¿como acabar con aquella tortura?

Dos semanas mas tarde, el acoso de correos aun seguía, y su madre poco la veía... como explicarle la realidad de todo aquello... ¿como explicar una fantasía tan atroz? Debía volver a clase... no iba a perder un curso por culpa de todo el instituto, debía ser fuerte... era su locura, no había echo daño a nadie... No se merecía este acoso. Así que sin pensarlo mucho, decidio prepararse para a las dos ultimas horas de clase...

Los pasillos no estaban solitarios... todos se encontraban con el cambio de clase, Marie, no paso desapercibida, muchas miradas fueron a ella, al igual que los tantos comentarios... Ella bajo la cabeza, y directa fue a su taquilla, ignorando esas miradas, esos murmuros demasiado altos... Cerró la taquilla, siguió su camino, obligándose a no detenerse.

- Marie, Marie, Marie espérame -le era muy conocida la voz, pero se obligó a si misma a no detenerse... ya había sufrido bastante, no soportaría otra avalancha. Alguien le cogió del brazo y la obligó a pararse... no podía ser... Era Peter, ahora si que le urgía que la tierra se la tragara... Se avergonzaba tanto de si misma, que no era capaz de mirarle a los ojos.

- Tengo que irme, tengo prisa... -necesitaba desaparecer de allí...

- Ei espera... por favor.. solo un momento...

- Ui mirar!!! Van a cumplirle la fantasia a Marie ¿Te ayudamos? -se burlaron unos chicos.

- ¡Quien se meta con esta chica le parto la cara! -Todos callaron, la primera sorprendida fue Marie... -por favor... hablemos... -ella no pudo negarse...

- Escucha Zack... Yo lo siento... no se porque siento eso... iré a ver un psiquiatra.

- Tranquila mujer, no es tan grave de verdad... es algo normal, lo se porque mi primo es psicólogo, me cuenta cada historia... que la tuya es de la más normal... a ver ¿tu padre te abandonó verdad?

- ¿Tu como lo sabes? -se sorprendió Marie.

- Ya has visto que en este centro, las noticias vuelan.

- Ah ya... -Respondió desilusionada.

- Tu madre esta tan ocupada, que ni te presta atención... ¿cierto? -no hizo falta palabras, con un gesto de cabeza confirmo.

- ¿Yo te gusto? -la miró directamente a los ojos. Ella bajo la cabeza sonrojada, hizo lentamente una confirmación -¿en tu fantasía yo te hago pasar un mal rato, pero de esos de verdadero sufrimiento?

- Al principio si... pero me niego, pero al final, me haces cosas muy gustosas, me dejo hacer, te pido más y mas...

- Entiendo... reina... tu no quieres que te violen, realmente estas deseando sentirte deseada, que te hagan ese caso, que todos te niegan, mostrarle al mundo... que tu también eres mujer, además no deseas un depravado de la calle, me deseas a mi, no soy mal tipo, ¿por que en forma de violación? Porque los violadores, encuentran actractivas, “follables”, deseables a sus victimas, cosa que ningún chico a demostrado interés en ti, no entiendo porque, porque eres bien guapa... ¿Sabes que es una fantasia muy común en las mujeres? Pero para nada desean que las violen... más bien están buscando algunos de los motivos anteriores...

- ¿Entonces? ¿No estoy para que me encierren en un manicomio?

- Claro que no -Peter no pudo evitar reírse -¿Oye me permitirías invitarte a tomar algo despúes de clase?

- ¿A mi? ¿de verdad? ¿No preferirías otra chica?

- No quiero otra chica... Te quiero a ti, me pareces una chica muy guapa, aunque seas muy tímida, estoy convencido, que la simpatía es tu don.

- Gracias... Pos si estás seguro... acepto...

Esa fue la primera salida, de muchas otras que siguieron... Muchas otras con un beso en los labios como despedida. Marie no daba crédito a lo que estaba viviendo, ¿como era posible que el chico mas sexy del planeta, se haya fijado en ella? Pero contra más días pasaba, más le gustaba, incluso se sentía enamorada. Ya en el instituto no se metían con ella, mas bien todas la envidiaban por ser novia del chico más deseable... Él tenía razón desde que él estaba en su vida, la fantasía de Marie, había desaparecido de su mente, ya todas las fantasías eran de puro amor, pero siempre con Peter en ellas.

Ya hacían más de de un mes que salían, Marie se sentía la chica mas feliz del mundo, ya tenía un motivo para arreglarse... ya tenía un motivo para vivir. Era Sábado las vintiuna horas marcaba el reloj. A ella le quedaba tan poco para arreglarse, Zack no tardaría en recogerla, era puntual, tan caballeroso...


El timbre sonó con veinte minutos de retraso... era extraño que llegará tarde, pero a todos les pasaba alguna vez, eso no cambiaba lo estupendo que era... Ya desde que abrió la puerta, lo noto extraño, pero no le dio importancia, cogió cuatro cosas y marcharon... la cena... fue silenciosa, el ambiente se sentía tenso... Marie no entendía el porque, pero lo notaba extraño... como mal humorado, sus gestos eran violentos...

- ¿Estás bien?

- Claro... ¿por que? -contestó bruscamente.

- Por nada... Te veo extraño...

- Pos te equivocas.... Sabes hoy estás muy sexy... te comería enterita...

- Que cosas dices... -sabia que lo decía con todo el cariño y respeto... nunca intento meterle mano, como él decía.. era la primera relación de ella, no quería hacerla daño.

De camino a casa, sin aviso Marie notó como su trasero era manoseado por la mano de Peter...

- Eh... ¿que haces? -le preguntó Marie molesta.

- Hay nena te deseo tanto... quiero besarte, quiero tocarte de arriba a abajo... quiero poseerte... -el rostro de Zack se acercaba velozmente al cuerpo de Marie...

- Eh no, ¿que haces? ¡para!

- Vamos nena, llevamos ya un mes, ya es hora que follemos -le insinuo Zack, manoseandola de arriba a abajo, intentando besarle los labios...

- ¡No, aun no, no estoy preparada! ¿pero que te pasa? Me dijiste que esperarias... siempre lo has echo... ¿porque hoy no? -intentaba apartarle Marie.

- llevaba dos meses sin drogarme... pero no he podido mas, me he tomado un buena dosis de droga.. ¡¡¡la necesitaba!!! ¡¡¡Ya no la voy a soltar jamás!!! Soy un drogata, quien me quiera, me tiene que querer así... Mira nena, estoy muy cachondo, toca mi polla... esta ardiendo por ti... -cogió la mano de ella, pese a la resistencia de esta, se la llevó a su pene.

- ¡¡¡No, no quiero, no!!! -grito ella con desesperación.

- No te resistas, te va ha gustar... voy hacer tu fantasía realidad... lo estás deseando...

- No no quiero... No así... no...

- Callate puta -la arrastró a un callejón, la empujó bruscamente, se lanzó sobre de ella, le arrancó la ropa, le sostuvo las manos, se sacó el pene, la penetró sin cuidado ninguno... ella intento defenderse, intentó gritar... pero su agresor le tapo la boca con violencia, al igual que las embestidas que se adueñaba de su cuerpo, su alma y su ser... Lágrimas resbalaban por sus mejillas, su alma gritaba de lo más profundo... en ninguna de sus fantasías transcurría así... ese infierno era insoportable e indeseable... De mientras seguía esta pesadilla sin fin, ella noto como dejaba de ser dueña de su cuerpo y alma, el dolor físico era insoportable, pero el dolor emocional, superaba cualquier otro... deseaba la muerte, antes que aquel infierno que no acababa... Detestaba su fantasía mas que nunca... ya que realmente ella no deseaba ser violada... sino ser deseada para aquel que tanto le gustaba... realmente ignoraba el psicópata que en el se hallaba.

La fantasía de la violación es más comun de lo que muchos se creen. Aunque parezca algo depravado de psicópata, la chica, no desean que la violen, lo que realmente esta deseando es sentirse deseada y querida, realmente esa fantasía es con alguien conocido que les gusta o desea, y que ella lleve el control de la situación...


Escrito: 26 de enero del 2014

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